El próximo fin de semana, como marca el calendario una vez terciado el mes de abril, tendrá lugar uno de los acontecimientos del año más emocionantes y mágicos que vive la comarca asturiana de los Picos de Europa gracias a la captura y subasta pública del primer salmón que se pescará en el río Sella, conocido como “campanu”. Un ejemplar que aspira al título de todo el Principado, lo que incrementa sustancialmente su valor, en disputa con otros cauces fluviales como el Narcea, el Eo, el Esva, el Nalón, el Piloña, el Cares y el Deva.
El domingo 13 de abril se abre la veda de la pesca con muerte del salmón en Asturias. Y como manda la tradición, en cuanto el afortunado pescador eche a tierra el ejemplar más madrugador de la temporada en el Sella las campanas de la iglesia del antiguo monasterio de San Pedro de Villanueva, cenobio que alberga el Parador de Turismo de Cangas de Onís, volverán a repicar para anunciar a los vecinos que el preciado salmón ha sido capturado. Un tañido y una ocasión realmente singulares puesto que es el único día del año en que las campanas del que fuera monasterio benedictino despiertan de su letargo habitual para doblar por el "campanu".
La tradición del “campanu” se enraíza desde tiempos inmemoriales con el monasterio ribereño de San Pedro de Villanueva, que tenía otorgada por concesión real la vigilancia del tramo del río Sella comprendido aproximadamente entre Cangas y Arriondas. Los monjes gestionaban el uso del río, y por supuesto el aprovechamiento de sus recursos, ya que cobraban tributos a quién pescaba en sus pozos. Cuando avistaban que los salmones comenzaban a remontar las aguas rumbo a la cabecera para desovar, realizaban desde el campanario un toque de júbilo (“campanu”) para avisar a la población de que fueran a pescar y generar ingresos para el sustento del cenobio.
Si el "campanu" es madrugador, la jornada dominical comenzará con el sonido de campanas rompiendo el silencio del amanecer y la emoción de la Subasta del Campanu del Sella a las 18:00 horas en el entorno del puente romano que como todos los años organiza el Ayuntamiento de Cangas de Onís en colaboración con la Asociación de Pescadores “El Esmerillón” y que genera una enorme expectación. Si se demora, la subasta tendrá lugar el día en que se produzca la captura a esa misma hora. Una puja en la que la disputada pieza alcanza precios estratosféricos, habiendo llegado a pagarse algún año hasta 18.000 euros . El "campanu" del Sella 2024, un tardío ejemplar de 6,3 kilos y 84 centímetros que se resistió siete largos días hasta que mordió el anzuelo, se adjudicó por 11.100 euros.
Subasta del Campanu del Sella 2024. Foto: COPE Ribadesella.
Platos especiales con salmónidos
El "campanu" es el único ejemplar de salmón salvaje que la normativa nacional permite comercializar. En su honor y el de la gran afición por la pesca fluvial existente en la zona, el Parador cangués tiene por costumbre ofrecer durante estos días a sus clientes a modo de homenaje gastronómico al “príncipe del río” algún plato como este pescado como base, elaborado como no puede ser de otra manera con salmónidos procedentes de piscifactoría. Este año el jefe de Cocina, Santos Viti, y su equipo nos descubren un singular, colorido y refrescante salmón marinado, eneldo, manzana y yogur de Porrúa, parroquia del concejo de Llanes, lleno de matices y contrastes.
Paralelamente, en línea con la potenciación de los productos de cercanía, se ha apostado en el apartado de las recetas con pescado por un mayor protagonismo de especies fluviales con presencia en aguas asturianas, incorporando a la nueva carta primavera verano la “reina del río”: la trucha asalmonada del Río Bedón (Llanes). Otro salmónido que se cría en piscifactorías de aguas limpias y puras del Principado y que el Parador prepara esta temporada ahumada al horno, con crema de quesos y tirabeques.