Cinco Paradores con piscina para encarar la recta final del verano
30 de Julio 2024

Si hay algo que nos encanta de la temporada estival, es el calor que invita a disfrutar de un refrescante baño. Paradores es la elección perfecta para cerrar el verano y relajarte mientras percibes el aroma de la naturaleza, escuchas el canto embriagador de los pájaros o simplemente admiras las impresionantes vistas del patrimonio cultural que rodea nuestros edificios. Si aún no tienes planes y te apetece hacer una escapada, toma nota de estos cinco increíbles Paradores con piscina. Estamos deseando recibirte.

 

Baño entre arte e historia del siglo XVII

 

No hay mejor manera de encarar la recta final del verano que en el Parador de Alcalá de Henares. Su piscina, rodeada por tres conventos del siglo XVII, ofrece un entorno único para refrescarse y desconectar de la rutina. Sin embargo, la magia de este rincón madrileño va mucho más allá: espacios como el claustro y el Jardín Tallado contribuyeron a que el diseño del Parador fuera expuesto en el Museo de Arte Moderno de Nueva York. Además, su ubicación es ideal para recorrer a pie el casco histórico y apreciar edificios emblemáticos, por ejemplo, la capilla de San Ildefonso, el palacio Arzobispal y el convento barroco de las Bernardas.

QUIERO RESERVAR EN EL PARADOR DE ALCALÁ DE HENARES

 

Un chapuzón entre parques naturales y lagunas

 

En Ciudad Real, el Parador de Manzanares es la escapada perfecta para desconectar. Desde la comodidad de la hamaca, disfrutarás del delicioso aroma de la naturaleza, ya que el edificio está rodeado por tres grandes espacios naturales: el Parque Natural de Cabañeros, las Lagunas de Ruidera y las Tablas de Daimiel. Para explorar estos entornos, no hay mejor opción que las actividades del programa "Naturaleza para los Sentidos". Por ejemplo, a través de la ruta "Lugares entre lagunas" descubrirás la fauna, la flora y los secretos de este maravilloso entorno. Además, el restaurante está listo para recargar tus energías con suculentas elaboraciones como el tiznao de bacalao y el pisto manchego.

QUIERO RESERVAR EN EL PARADOR DE MANZANARES

 

La piscina del Parador de Segovia y sus impresionantes vistas al patrimonio cultural

 

El Parador de Segovia, ubicado a tan solo tres kilómetros del centro histórico, es una opción inmejorable para quienes buscan una escapada relajante. Su piscina, rodeada por un exuberante jardín y con impresionantes vistas al patrimonio cultural de la ciudad, es uno de nuestros rincones favoritos, junto con la terraza del restaurante. Allí, podrás saborear platos tradicionales, como el asado de cochinillo y el lechazo, el singular bacalao al estilo Carrascal del Río o postres como el icónico ponche de yema, mientras contemplas a lo lejos el emblemático acueducto, el alcázar y la catedral.

QUIERO RESERVAR EN EL PARADOR DE SEGOVIA

 

Ven a refrescarte a la antigua mansión de los Álvarez de Toledo

 

¿Se te ocurre un lugar más original para darte un chapuzón que en un castillo? El Parador de Oropesa, antigua fortaleza de los Álvarez de Toledo, cuenta con una atractiva piscina con unas vistas envidiables al campo Arañuelo. Además, merece la pena explorar su enorme patio de armas y el salón con espléndidos artesonados mudéjares, que te sumergirán en una atmósfera medieval. La belleza de la ciudad toledana de Oropesa tampoco se queda atrás; es una de las villas medievales mejor conservadas, destacando especialmente el convento de las Misericordias, la plaza del Navarro y la emblemática Torre del Reloj. Si prefieres la naturaleza, no te pierdas las rutas por los hermosos valles de la Vera y del Tiétar.

QUIERO RESERVAR EN EL PARADOR DE OROPESA

 

 

El Parador que acogió a Hernán Cortés

 

Otro castillo con piscina es el Parador de Zafra. Este edificio ha acogido a ilustres figuras, en concreto, a los Duques de Feria y al conquistador Hernán Cortés. Los detalles artísticos, por ejemplo, los herrajes, los pasamanos y los artesonados, revelan la rica historia que se ha tejido entre sus muros. Además, su propuesta gastronómica refleja las influencias de las culturas medievales a través de platos tradicionales como las migas del pastor con huevos, chorizo y panceta, o la caldereta de cordero con D.O. Corderex.

QUIERO RESERVAR EN EL PARADOR DE ZAFRA