En esta época del año son tradicionales los potajes de vigilia. Una de las recetas más populares del tiempo de Cuaresma es la que se realiza con garbanzos, espinacas y bacalao. Con las limitaciones propias del confinamiento muchas veces toca improvisar y tirar de imaginación. Juan Antonio Aguilar, chef del Parador de Málaga Golf, ha echado un vistazo a su nevera y, a falta de bacalao, os propone elaborar este reconfortante plato con langostinos. ¡Una sabrosa variación!
Ingredientes 4 raciones
- Garbanzos 400 grs.
- Agua c/s
- Cebolla 100 grs.
- Tomate 100 grs.
- Zanahoria 100 grs.
- Ajo entero 4 ud
- Laurel 2 Hojas
- Espinacas 200 grs.
- Langostinos 200 grs.
- Azafrán molido 1 sobre
- Sal c/s
Preparación-Elaboración:
Se ponen en remojo el día anterior los garbanzos con agua caliente y sal.
Al día siguiente, se pone al fuego una olla con agua; calentar y una vez templada, añadir los garbanzos, la cebolla, tomate, zanahoria, los ajos enteros y las hojas de laurel.
Aparte, cocer las espinacas en agua hirviendo y refrescar con agua fría.
Pelar los langostinos y reservar ( los sustituimos por el clásico bacalao) ya sabéis, lo que tenemos en la nevera...)
Una vez los garbanzos estén tiernos, sacar las verduras y pasar por la batidora, colar e incorporar al potaje, rectificar de sal. (También podemos poner las verduras muy picadas y que la encontremos, pero para los más peques es mejor trituradas).
Añadir las espinacas, los langostinos y el azafrán molido, un minuto antes de apartarlo del fuego, rectificar de sal y listo.
¡Buen provecho!