El rabil, un pez de la familia de los túnidos más estilizado que otros atunes, especie muy conocida y apreciado en las costas canarias, es la apuesta del Parador de La Palma para participar en la X Ruta de Cruces y Tapas de la isla bonita.
El establecimiento de la cadena hotelera pública concurre en esta edición exclusivamente en la categoría de “Tapa Palmera” con este producto local que presenta como unos tacos de rabil isleño macerados en cremoso de bulbo de apio y encurtidos. Una elaboración que se sirve a temperatura ambiente con brotes y que resulta muy apetecible ahora que empieza a hacer calor.
Un total de 23 establecimientos de hostelería y restauración de Santa Cruz de La Palma, Breña Baja, Breña Alta y Villa de Mazo participan este año en la Ruta de Cruces y Tapas. Una iniciativa gastronómica que, en esta edición, se celebra entre el 20 de mayo y el 15 de junio, con el compromiso de dinamizar la comarca y fusionar gastronomía, tradición y turismo, ofreciendo a residentes y visitantes exquisitas tapas.
La cabra 'aplataná', A llorar pa' la marea, La Torrija de Lila, Papa rellena de cochino negro, Trampantojo: una trampa para un antojo, Ropa Vieja con Delicias de Mar, Delicia Palmera con Toque Oriental, Aplatanada, Mar, arena y lava, La Bonita renace o Bolitas Crujientes con queso, son los sugerentes nombres de algunas de las otras 38 tapas que se podrán degustar durante la ruta al precio de 3 euros con bebida incluida.
Con cada tapa los clientes coleccionarán un sello con el que entrarán en el sorteo de una bolsa de obsequios consistentes en estancias en alojamientos rurales, experiencias gastronómicas y de ocio activo, material tecnológico, bonos culturales, lotes de quesos y vinos acogidos a las Denominaciones de Origen de La Palma, gofio y cestas de productos frescos, sanos, ecológicos y de residuo cero cedidos por un total de 29 empresas y entidades locales.
La Ruta de Cruces y Tapas, que promueve la Delegación de la Cámara de Comercio en La Palma, cuenta con el respaldo de los cuatro Ayuntamientos, el Cabildo Insular de La Palma y las asociaciones de empresarios de Santa Cruz de La Palma, Breña Alta y Breña Baja. La iniciativa ofrece una atractiva experiencia complementaria a una fiesta tradicional, en la que cada 3 de mayo se engalanan las cruces que se encuentran diseminadas en los antiguos caminos reales de los distintos barrios de la comarca este con flores, papeles de colores, semillas, telas, joyas, etc. y existe la costumbre de irlas visitando de cruz en cruz. Al lado de la cruz, e incluso a veces en balcones y azoteas, aparecen los mayos: muñecos grotescos (“machangos”, para los palmeros) que representan diversas escenas, algunas relacionadas con la vida tradicional y otras con la actualidad.
