Septiembre es el nuevo mes de los propósitos. El momento en el que, tras el fantástico reseteo veraniego, vuelves con las pilas cargadas y puedes cumplir lo que te propongas. Tal vez tus objetivos tengan que ver con el bienestar físico o emocional, con tu enriquecimiento personal o crecimiento laboral pero sea como sea, todos servirán para elevar tus niveles de felicidad.

¿Y cuál es el papel de Paradores en todo esto? El más importante. El de facilitarte la lista de objetivos, realistas y asumibles, y las tentadoras herramientas, que no son otras que nuestros propios alojamientos y todo lo que pueden ofrecerte, para que puedas llevarlos a cabo. Toma nota y prepara la maleta. Tienes el éxito asegurado.

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De vez en cuando, hacemos bien en tomarnos un descanso para cuidar nuestra salud y mimarnos. Con ganas. Sin remordimientos. Sin móvil. Es necesario pedir tiempo muerto al ritmo diario y darnos algún homenaje de vez en cuando, como el que supone relajarse en un maravilloso spa o disfrutar de un increíble tratamiento en los centros wellnes que podrás encontrar en muchos de los Paradores. Un masaje relajante, un ritual de belleza oriental, un tratamiento corporal o facial para hidratar y exfoliar tu piel... Saldrás como nuevo y te harán brillar por dentro y por fuera. Por ponerte algunos ejemplos, en el Parador de Cádiz, una de las joyas vanguardistas de la red y con increíbles vistas al Atlántico,  puedes rendirte a las maravillas que te ofrece su spa, abierto todo el año, y probar su circuito termal (imprescindible previa reserva) para salir totalmente rejuvenecido y disfrutar de todo lo que puede ofrecerte esta increíble ciudad. Para los enamorados de Canarias, en el Parador de Cruz de Tejeda, la experiencia será de altura. Y no sólo por encontrarte a 1560 metros de altitud, podrás relajarte mientras observas los espacios sagrados de las montañas canarias declaradas Patrimonio de la Humanidad y probar el baño de burbujas, el baño turco, las tumbonas térmicas, la ducha ciclónica o la ducha escocesa bitérmica, por citar algunas de sus instalaciones. Y si prefieres un destino de interior, en el Parador de La Granja, un impresionante edificio del siglo XVIII a los pies de la sierra de Guadarrama, escaparás del estrés y te rendirás a la tranquilidad en el ambiente de relajado lujo del que fuera refugio de reyes en otro tiempo. 

Creemos firmemente en el valor de esta afirmación. Cultivar tu mente es fundamental para tu propio bienestar pero también para poder enriquecer tus conversaciones de amigos. Y nuestros Paradores pueden aportarte más de una interesante anécdota histórica que tal vez no conozcas y con la que, seguro, dejarás con la boca abierta a tus oyentes. ¿Sabías que el Parador de Monforte de Lemos, que se erige en un monasterio, es una de las pocas obras arquitectónicas de estilo gótico, renacentista y neoclásico? ¿Y que ofrece una de las mejores vistas de la Ribeira Sacra al estar ubicado en una colina? ¿Y conocías que El Parador de Sigüenza, construido sobre una alcazaba árabe, fue la residencia de reyes, obispos y cardenales, dicen que lo habita un fantasma y ha sido escenario de numerosas películas? Todos los alojamientos de la red tienen mucho que contar. Para sorpresa de muchos, nuestro Parador de Melilla, que ofrece las mejores vistas de la ciudad, se localiza en una de las ciudades exponentes del Modernismo del siglo XX. La Reconquista, el Palacio de la Asamblea, la Casa Melul o la fortaleza, Melilla la Vieja, son muestras de un pasado histórico que no te dejará indiferente.

No hace falta que repliques la gesta de Cervantes o te obsesiones por ser el próximo Nobel de Literatura. Puedes empezar simplemente por apuntar tus ideas o por escribir un diario. Eso sí, necesitas contar con algún rincón inspirador como el que encontró el autor británico William Somerset Maughan en el Parador de Oropesa. Lo que en principio iba a ser una breve parada se convirtió en su refugio predilecto para escribir y, llegó, incluso, a elogiar este rinconcito toledano en la prensa de la época. La admiración fue mutua y el Parador conserva en su memoria su escritorio junto a una fotografía.  Y si hablamos de lugares literarios no podemos dejar de mencionar el Parador de Alcalá de Henares, uno de los escenarios que mejor conserva la esencia cervantina y lugar ideal para sumergirse en un buen clásico de la literatura. Y siguiendo con los clásicos: Quevedo dio rienda suelta a la inspiración bajo los imponentes cimientos del Parador de León, uno de los alojamientos más emblemáticos de la red, que atesora casi 500 obras artísticas.

A veces no reparamos en ellas. Pero algo tan rutinario como un atardecer puede convertirse en el mejor momento del día. Y los enclaves privilegiados en los que se encuentran muchos de los Paradores, regalan estampas inolvidables como la que te brinda el Parador de Antequera. Con sus enormes cristaleras, ofrece unas vistas envidiables de atardeceres que propician desconexión total. Sin duda es en esos momentos cuando conectas contigo mismo y haces balance, así que, ¿por qué no apostar por este tipo de destinos donde tu mente tenga amplia libertad para reflexionar?  El Parador de Gijón, un molino centenario rodeado de jardines y estanques, será una elección acertada. En pleno parque de Isabel la Católica, es una zona verde perfecta para concentrarte en tus nuevas metas. Otra recomendación es el Parador de Bielsa, un refugio de montaña, rodeada de naturaleza, en el corazón del Valle de Pineta, cuya localización te invitará a desconectar de todo y hará que fluyan tus pensamientos.

Viajar y vivir experiencias únicas siempre sabe mejor junto a buena compañía. Y hay lugares que tienen un no se qué, por su oferta cultural o gastronómica, para que la vivencia compartida se convierta en algo muy especial. Es el caso del Parador de Trujillo, al que te recomendamos que vayas bien acompañado por encontrarse en pleno centro histórico y ser el punto de encuentro idóneo para saborear la excelentísima cocina extremeña, encabezada por el jamón de la Dehesa de Extremadura, los quesos y la ternera retinta. Otra buena opción, el Parador de Ronda, este impresionante balcón  a 120 metros del Tajo, os espera con un sinfín de experiencias: visitas a entornos naturales como la Sierra de Grazalema, itinerarios de interés como la ruta de los pueblos blancos de Cádiz y ocio nocturno por su casco histórico son solo algunas propuestas. Y si buscas un destino familiar, el Parador de Teruel será el lugar perfecto: muy cerca disfrutarás del parque cultural, científico y de ocio de Dinópolis. Y, por supuesto, no dejéis de explorar la tradición artística de la que presume la zona:  el Mausoleo de los Amantes de Teruel o la catedral de Santa María de Mediavilla son paradas obligatorias. 

No está de más mencionar la importancia de dedicar tiempo a la pareja. En Paradores puedes hallar sitios que avivan la llama del amor. Es el caso del Parador de Hondarribia. El municipio vasco es un referente turístico para recorrer sus hermosas calles de estilo parisino cogidos de la mano y el propio Parador resulta de lo más inspirador.  Allí se alojaron el emperador Carlos V, Felipe IV y V, y hasta el mismísimo Velázquez. Y presume de unos increíbles tapices diseñados por Rubens. Os ecantará. Tanto como el Parador de Baiona, que se localiza en una atmósfera romántica y hermosa. Caminar por la playa de Rodas, "la más bonita del mundo" o contemplar desde el mirador las vistas a las Islas Cíes son oportunidades que no podéis perderos. Y no menos importante es el Parador de La Palma en la Isla Bonita. Actividades por la naturaleza, ecosistemas volcánicos o rutas de senderismo están esperando a recibiros. Y, por supuesto, los increíbles atardeceres. No hay nada más romántico.

Es el momento del año en el que la curva de la felicidad está más pronunciada y nos acordamos de las cuotas que pagamos del gimnasio. Es momento de recuperar la rutina de ejercicio y no perderla cuando planifiquemos esas escapadas de fin de semana que te van a saber a gloria. Por eso en Paradores tenemos los mejores aliados para cumplir este propósito. Entre ellos, cómodos y amplios gimnasios o pistas de pádel y tenis para recrearte en compañía. Y mucho más si hablamos de cicloturismo. Ya son un total de 27 los Paradores que han adaptado sus instalaciones para que no renuncies al placer de pedalear. Allí encontrarás zona de custodia identificada con capacidad para al menos 10 bicicletas, zona de taller, así como tiendas, talleres y servicios de alquiler de biciletas asociados en las proximidades y hasta rutas personalizadas confeccionadas por cada Parador . Tú eliges la dificultad del itinerario y los kilómetros que quieres recorrer. Una nueva forma de viajar, saludable y sostenible, que podrás encontrar, por ejemplo, en el Parador de Nerja, donde podrás recorrer los increíbles parajes subido a tu bici. Un lugar propicio también para otro tipo de deportes como el buceo, snorkel, kayak... te costará elegir.