La localidad toledana de Oropesa acoge este fin de semana la décimo quinta edición del Certamen Internacional de Teatro de Calle “Noctívagos”, un certamen que presenta desde el viernes hasta el domingo, a diferentes horas del día, a nueve compañías procedentes de Andalucía, Extremadura, Castilla-La Mancha y Madrid, seleccionadas entre más de 200 candidaturas, que representarán sus espectáculos escénicos callejeros en diversos espacios emblemáticos oropesanos, como el castillo, el Paseo Alto y la Plaza Vieja. Consulta la programación.
Como ya es costumbre, el certamen contará con la colaboración de los bares y restaurantes de Oropesa ofreciendo sus propuestas gastronómicas a través de la Feria de la Tapa “Tupa de Tapas”. Dado que este año el festival se centra en el lema «Mujeres», destacando la importancia y contribución de las mujeres en el teatro, en el Parador de Turismo, uno de los habituales de esta cita culinaria, las encargadas de idear, elaborar y presentar la tapa han sido Jessy da Cruz y Ainara del Río, las dos cocineras integrantes del equipo de Cocina del establecimiento.
Al ser un año especial donde todo el fin de semana teatral gira en la reivindicación del papel que la mujer ha jugado a lo largo de la historia, en el presente y en el futuro de nuestra sociedad y nuestra cultura; desde el Parador toledano no han querido dejar pasar la oportunidad de recordar a las mujeres tan influyentes que han pasado por el establecimiento.
Entre muchos referentes han decidido centrarse en Emilia Gil , “la Abuela”, como era conocida por los empleados del Parador, de cuyos fogones se hizo cargo en los años cuarenta. Quienes la recuerdan aseguran que cocinaba todos sus platos con un cariño y un buen hacer que dejaba con una sonrisa en la cara a todos aquellos que los probaban.
Emilia Gil, "la Abuela", con el pañuelo en la cabeza.
En homenaje a su figura, Jessy y Ainara han hecho un trabajo de búsqueda de platos de Emilia Gil para reinterpretar la tapa de este año, a la que han bautizado como “Crujiente de piquillo y migas”. En este caso se trata de unos pimientos del piquillo rellenos de migas de “la Abuela”, rebozados y terminados con una base de patatas machaconas y crujiente de panceta ibérica.
Crujiente de piquillo y migas.
Entre sus recetas de guisos, tortillas y demás elaboraciones, Emilia hace referencia a sus migas que con tanto mimo calaba, condimentaba y terminaba a fuego lento, para deleite de quienes pasaban por Oropesa. Las cocineras se han centrado en unos platos de los años 40, adaptándolos a una tapa actual, pero sin perder la esencia de la cocina de Paradores. ¡Acércate a probarla!