En esta ocasión, el relato nos transporta a La Gomera, donde la leyenda, evocada en la novela La Gobernadora, narra el romance entre Cristóbal Colón y Beatriz de Bobadilla, apodada "La Cazadora", en honor a su padre, que fue cazador mayor de Enrique IV, y para diferenciarla de su tía, Beatriz de Bobadilla, marquesa de Moya.
El libro de Mario Escobar, La Gobernadora, presenta la fascinante historia de Beatriz de Bobadilla y Ulloa (1462-1504), una de las mujeres más influyentes de su época, aunque hoy en día ha sido olvidada por la historia.
Conoce la historia de La Gomera
La llegada de las primeras poblaciones a Canarias, provenientes del norte de África, se sitúa en torno al siglo I de nuestra era. Estas sociedades permanecieron relativamente aisladas hasta que el Archipiélago fue “redescubierto” por la Europa renacentista.
A mediados del siglo XV, Hernán Peraza “El Viejo” fundó San Sebastián. La familia Peraza se asentó definitivamente en la isla cuando la Corona de Castilla concedió el primer señorío de Canarias a Hernán Peraza “el Mozo” (1478), esposo de Beatriz de Bobadilla y Ulloa. El maltrato a los indígenas llevó a la Rebelión de los Gomeros en 1488, en la que Hernán Peraza hijo fue ejecutado. Los rebeldes intentaron asaltar la Torre del Conde, donde se refugiaba la hermosa Beatriz, quien resistió hasta la llegada de refuerzos. Tropas de Gran Canaria, bajo el mando de su gobernador Pedro Vera, levantaron el cerco y hicieron huir a los insurrectos.
Posteriormente, Beatriz de Bobadilla, con el apoyo del gobernador de Gran Canaria, aplicó duras represalias contra los nativos. Este fue un punto de inflexión en la historia insular, consolidando el régimen señorial en la isla, que perduraría hasta el siglo XIX.
En el siglo XX, La Gomera experimentó un notable desarrollo turístico que transformó su economía y vida social. Se construyeron numerosos hoteles y complejos turísticos, lo que permitió diversificar la economía y atraer a un gran número de visitantes de todo el mundo.
Hoy en día, La Gomera es una isla moderna y cosmopolita que ha logrado preservar su rico patrimonio cultural y natural.
¿Sobre qué trata la novela?
La Gobernadora, escrita por Mario Escobar, narra la fascinante historia de Beatriz de Bobadilla y Ulloa, quien, con apenas veinte años, llegó a la corte de los Reyes Católicos, apoyada por su tía, la marquesa de Moya. Su extraordinaria belleza pronto la convirtió en el objeto de deseo de los hombres más poderosos de su época, incluido el rey Fernando, quien quedó tan cautivado por ella que Isabel y la marquesa tramaron un plan para sacarla de la corte, proponiéndole matrimonio con Hernán Peraza, encargado de la conquista de La Gomera.
Según la leyenda, Beatriz, amante tanto de Fernando el Católico como de Cristóbal Colón, llegó a ser gobernadora de las islas de La Gomera y El Hierro. La novela retrata magistralmente su vida aventurera, marcada por su crueldad, belleza y pasión, así como su contribución a la conquista de Canarias.
Beatriz fue anfitriona de Cristóbal Colón, un aspecto biográfico notable y controvertido, además de su conocido enfrentamiento con los gomeros. La Cazadora conoció al futuro descubridor durante su estancia en la Corte a finales de 1491. Probablemente, un segundo encuentro tuvo lugar en el Puerto de Santa María, donde discutieron una posible visita a las islas. Se sugiere que Colón, debido a problemas con la carabela Pinta, se dirigió a San Sebastián de La Gomera no solo por el incidente del barco, sino también para reunirse con Beatriz.
Colón regresó a la isla en 1498, pero al enterarse de que Beatriz se había casado nuevamente, desistió de su aventura galante. En el verano de ese mismo año, Beatriz contrajo segundas nupcias con Alonso Fernández de Lugo, el conquistador de La Palma y Tenerife, cuya fortuna había crecido considerablemente gracias a sus acciones.
En La Gomera, Beatriz dejó a personas de confianza como administradores mientras se trasladaba a vivir a Tenerife con su segundo marido, donde ejerció el poder en su ausencia. No obstante, nunca olvidó a quienes la habían utilizado y, a lo largo de su vida, buscó venganza. La Reina Isabel le prohibió regresar a Castilla, salvo por su intervención o por razones de justicia, pero tras la muerte de la Reina, Beatriz pudo finalmente regresar.
A principios de 1504, volvió a su ciudad natal, Medina del Campo. Sin embargo, su vida no duró mucho más. En noviembre de ese año, fue hallada muerta en su cama, a los 42 años, y aún con gran belleza. Su muerte dejó dudas: ¿fue por causas naturales o fue envenenada?
La historia en el Parador
En esta isla se encuentra el Parador de La Gomera, situado en lo alto de un acantilado con impresionantes vistas al mar. Ubicado en San Sebastián, la capital y puerto de entrada a la isla, fue la última escala de Cristóbal Colón antes de embarcarse en su viaje hacia el descubrimiento de América en 1492.
El Parador presenta una arquitectura típica de la época colombina, con artesonados de madera, amplios patios llenos de vegetación y un mobiliario que evoca referencias marinas. Además, sus extensos jardines invitan a disfrutar de la tranquilidad y la exuberancia del entorno.
Este Parador rinde homenaje a la historia de Beatriz de Bobadilla y Cristóbal Colón, con varias obras artísticas que adornan sus paredes, recordando el rico pasado que lo rodea.
Ambos retratos son copias contemporáneas de obras del siglo XVI, realizadas al estilo de los retratos cortesanos de la época.
Alójate en el Parador de La Gomera para sumergirte en una historia apasionante. Allí podrás descubrir otros cuadros que narran relatos similares y admirar el imponente mar, donde, quién sabe, podría aparecer un nuevo conquistador.