La revista National Geographic ha elegido las “pequeñas joyas medievales de España que merece la pena conocer”. Pueblos con callejuelas empedradas, centros históricos amurallados y antiguos conventos y palacios en los que, además, encontrarás un Parador. Ven a conocer estos nueve Paradores y a empaparte de historia. 

• Puebla de Sanabria (Zamora)

La villa de Puebla de Sanabria se convirtió en la Edad Media en un enclave estratégico como zona de paso hacia Portugal. Es uno de los recintos fortificados mejor conservados de la provincia de Zamora y está declarada Conjunto Histórico-Artístico. La villa está rodeada de un rico patrimonio natural y en este entorno se encuentra el Parador, un edificio de piedra que fue construido para formar parte de la Red de Albergues de Carreteras del Estado.

• Sos del Rey Católico (Zaragoza)

Este precioso pueblo medieval de la comarca zaragozana de las Cinco Villas se llama así porque allí nació Fernando, el futuro esposo de Isabel de Castilla. La revista destaca la belleza de la Plaza de la Villa, con un edificio singular de la arquitectura civil aragonesa del siglo XVI. Otro de los edificios más representativos de Sos del Rey Católico es precisamente el Parador, un edificio de piedra con balcones de madera y unas espectaculares vistas a los campos de la comarca. El mejor plan en Sos es perderte por sus callejuelas e ir descubriendo los palacios, iglesias y ermitas que pueblan esta villa.

• Trujillo (Cáceres)

La Plaza Mayor de Trujillo es un auténtico espectáculo. La estatua dedicada al conquistador de Perú, Francisco Pizarro, nacido en Trujillo, preside una imponente plaza en la que destaca el palacio del Marqués de la Conquista, con un gran balcón en una de sus esquinas y un enorme escudo de armas de Carlos V. Trujillo está repleta de edificios históricos como el que acoge el Parador, un convento franciscano del siglo XVI. El convento de Santa Clara está construido alrededor de un claustro central con columnas y arcos renacentistas, que conecta con una antigua iglesia de techo abovedado donde se encuentra el comedor.

• Alarcón (Cuenca)

En esta pequeña localidad de la provincia de Cuenca, el Parador es el protagonista. El castillo, con más de 13 siglos de historia, destaca en lo alto del pueblo en un paraje excepcional ya que se encuentra en una hoz sobre el río Júcar. En lo alto del Pico de los Hidalgos, las vistas de la zona son inmejorables. Está rodeado por un doble recinto defensivo y está único al resto de la muralla que rodea la villa de Alarcón.

• Sigüenza (Guadalajara)

En Sigüenza pasa lo mismo que en Alarcón: lo primero que ves (y que impresiona) es su castillo, en el que se encuentra el Parador. Esta fortaleza del siglo XII se construyó sobre una alcazaba árabe y en ella vivieron cardenales y obispos. Dentro, su patio empedrado, los balcones de madera y la capilla románica del siglo XIII son perfectos para disfrutar de esta villa medieval.

• Santillana del Mar (Cantabria)

La villa de Santillana del Mar nació en el siglo VIII, cuando un grupo de monjes que llevaban las reliquias de una mártir llamada Juliana se asentaron allí y construyeron una ermita para ella. Con el paso del tiempo se formó una villa llamada “Sancta Luliana”, la que hoy conocemos como Santillana. Cuenta con destacados edificios medievales, como la colegiata de Santa Juliana, la Casa de Leonor de la Vega y las torres del Merino, de los Velarde y de Don Borja. Además, esta villa es de las pocas de España que cuenta con dos Paradores: el de Santillana del Mar y el de Santillana Gil Blas.

• Olite (Navarra)

Este pueblo del corazón de Navarra parece salido de un cuento. Olite cuenta con uno de los conjuntos gótico-civiles más bello de Europa. Además, su bello casco histórico está repleto de caserones de piedra, palacios renacentistas y barrocos y preciosas iglesias. El Parador se encuentra junto al castillo medieval, conocido como el Palacio Real, que es el mayor atractivo de la localidad.

• Zafra (Badajoz)

Esta localidad se fundó hace casi mil años como fortaleza musulmana entre los reinos de taifas de Sevilla y Badajoz. Uno de los edificios más bonitos de Zafra es el palacio del Duque de Feria, que acoge el Parador. Entre las personalidades que se han alojado en él figura el descubridor extremeño Hernán Cortés.

• Hondarribia (Guipúzcoa)

Hondarribia se encuentra en la frontera con Francia, en un precioso paraje natural abierto a la bahía de Txingudi, donde el río Bidasoa llega hasta el Cantábrico. Y en sus callejuelas peatonales se encuentra el castillo de Carlos V que acoge el Parador de Hondarribia. Una construcción del siglo X con imponentes muros de piedra en el que se alojaron el emperador Carlos V, Felipe IV, Felipe V y hasta Diego de Velázquez. En su interior podrás disfrutar de los maravillosos tapices diseñados por Rubens sobre la historia de Aquiles.