Uno de los momentos más bonitos de cualquier boda es el primer baile de los novios, tras horas en la pista llega esa sensación que hace que tus invitadas digan... ¡Horror, no puedo con los tacones!
¿Qué solución tiene cualquier invitada? ¿Quitárselos e ir descalza? ¡No, no, no!...