Parador de León
El Hostal San Marcos, antiguo emblema de la influyente Orden de Santiago y uno de los monumentos más representativos del Renacimiento español, acoge desde 1986 el Parador de León, un museo viviente de historia y modernidad.
Reformado en un estilo vanguardista, que combina sabiamente pasado y presente, el Hostal San Marcos está plagado de espacios increíbles, como su cafetería situada bajo un impresionante techo del pintor Lucio Muñoz, la terraza a orillas del río Bernesga, o el Salón Capitular, de regios artesonados mudéjares.
Parador de La Palma
Parador de Gredos
Entre aguas cristalinas, agrestes rocas y verdes pinares, la historia de Paradores comienza aquí. Inaugurado por Alfonso XIII, el Parador de Gredos se convirtió el 9 de octubre de 1928 en el primer establecimiento de la Red.
Construido a partir de elementos traslados de la casa señorial de Villacastín, su recia arquitectura, de piedra y pizarra, esconde un confortable interior de inspiración castellana, en el que el acabado rústico de la madera crea espacios a la par nobles y acogedores, y convierte sus terrazas en espectaculares miradores a la Sierra de Gredos.
Parador de Las Cañadas del Teide
Parador de La Granja
Parador de Málaga Gibralfaro
Parador de Ceuta
Sobre la Plaza de África, en el centro de Ceuta, se alza el Parador, un moderno edificio adosado a las centenarias Murallas Reales y un lugar privilegiado desde el que contemplar el Mediterráneo, el Foso Real, el Monte Hacho o incluso la costa peninsular.
Su arquitectura y decoración, de influencia andalusí, te sorprenderán con magníficas lámparas y luminosas habitaciones asomadas a un jardín rebosante de palmeras, con una cuidada piscina y excepcionales vistas al mar. Además, su exquisito restaurante y sus amplios salones harán de este el lugar ideal para tus eventos y celebraciones.
Parador de Cervera De Pisuerga
Parador de Chinchón
Fundado por los primeros Señores de Chinchón en el siglo XV, el Parador ocupa el antiguo monasterio de Nuestra Señora del Paraíso, su claustro y escalera originales, y la primitiva iglesia, hoy convertida en una suite muy especial.
El edificio, en pleno centro de la villa medieval, cuenta con amplios jardines y una típica huerta conventual que hoy, llena de árboles frutales, crea un espacio ideal para desconectar y relajarte en la piscina, ubicada en los antiguos establos del monasterio. Además, el Parador posee un espectacular claustro acristalado, donde podrás disfrutar de una exclusiva colección de arte religioso.