Paradores y el Festival Internacional de Teatro Clásico de Almagro se unen para difundir el patrimonio histórico y cultural del Siglo de Oro
Raquel Sánchez, presidenta de Paradores, e Irene Pardo, directora del Festival Internacional de Teatro Clásico de Almagro

La Fundación y la cadena pública hotelera firman un acuerdo de colaboración   para promocionar la mejor imagen de España, apostando por la protección del patrimonio histórico y cultural y la promoción de la economía local.

 

Los clientes de Paradores se podrán beneficiar de un descuento del 20% en la reserva de entradas del Festival a través de un código promocional.

 

El Parador de Almagro se convertirá en la sede oficial de las ruedas de prensa de presentación de las compañías y actores. También albergará los coloquios ‘Versos Libres a Plena Luz’ y ‘A escena, teatro y moda’ del Ateneo de Almagro. Todos los sábados del mes de julio tendrán lugar visitas teatralizadas al antiguo convento de Santa Catalina.

 

En el apartado gastronómico, el Parador ha diseñado un menú especial inspirado en las obras de Calderón de la Barca.

 

Raquel Sánchez, presidenta de Paradores, e Irene Pardo, directora del Festival Internacional de Teatro Clásico de Almagro, han firmado esta mañana en el Parador de Almagro un acuerdo de colaboración para fomentar las actividades y el intercambio de experiencias profesionales y artísticas vinculadas al Siglo de Oro, impulsar la difusión del festival y promocionar la mejor imagen de España, apostando por la protección del patrimonio histórico y cultural y la promoción de la economía local.

 

Para la presidenta de la hotelera pública, Raquel Sánchez, la firma de este acuerdo forma parte de nuestro compromiso por fomentar y difundir el enorme patrimonio histórico y cultural de España. Desde Paradores, como empresa pública, comprometida y de nuestro tiempo, queremos seguir contribuyendo hoy a la difusión de la cultura y del conocimiento. Y hacerlo además de la mano de un festival feminista, inclusivo y dedicado a una época de nuestra historia, el Siglo de Oro, determinante para el desarrollo de las letras, las artes o la ciencia”.

 

Raquel Sánchez se ha mostrado muy satisfecha con esta colaboración que ayuda “a dar a conocer al mundo lo mejor de la cultura y el patrimonio de nuestro país, un motivo de orgullo y de reivindicación”.

 

Por su parte, Irene Pardo ha subrayado la importancia de esta alianza: “El compromiso de Paradores con la cultura y la tradición encaja plenamente con la filosofía del Festival. Además, el Parador de Almagro se ha convertido en uno de los espacios clave para muchas de nuestras actividades y convocatorias y sentimos que cada año nos acogen con ilusión y entrega”.

 

Durante el festival, que este año alcanza su 47 edición, el Parador de Almagro se convertirá en la sede oficial para las ruedas de prensa de presentación de las compañías y actores, donde al finalizar se servirá una degustación de productos locales en colaboración con la Asociación para el Desarrollo del Campo de Calatrava durante los días 3, 4, 15 y 19 de julio.

 

Además, los clientes de Paradores se podrán beneficiar de un descuento del 20% en la reserva de entradas del Festival a través de un código promocional (consultar condiciones en la página web del Festival).

 

Coloquios de proximidad

 

El Parador acogerá un año más la propuesta del Ateneo de Almagro “Versos Libres a Plena Luz” un ciclo de coloquios de proximidad sobre teatro y artes escénicas con actores y directores de trayectoria consagrada con un formato de entrevista cara al público en un ambiente distendido y dialogante.  La entrada es libre hasta completar aforo. En esta ocasión participarán Pedro Yagüe, iluminador escénico -7 de julio-, Ana Zamora, directora escénica -14 de julio-, Laila Ripoll, directora escénica y dramaturga -21 de julio- y el actor Carlos Hipólito -27 de julio-.

 

Artes escénicas y moda

 

También en colaboración con el Ateneo, el Parador albergará la sección “A escena, teatro y moda”, donde, el 18 de julio, Paola de Diego, artista plástica y diseñadora de moda y vestuario, escenógrafa y docente universitaria, compartirá con los visitantes del Festival su proceso creativo, fusionando diversas disciplinas.

 

Visitas teatralizadas al Parador

 

Paralelamente a todos estos eventos, el Parador ha programado visitas teatralizadas al Convento de Santa Catalina todos los sábados de julio a las 11 horas a cargo de la compañía Umbra Teatro.

 

Un recorrido para descubrir la historia de este emblemático edificio y conocer sus patios e instalaciones en un antiguo cenobio del siglo XVII. Los asistentes descubrirán la historia de este emblemático edificio y recorrerán los patios e instalaciones del antiguo convento del siglo XVII donado por Jerónimo Dávila de la Cueva como promesa a su joven esposa Catalina de Sanabria.

 

Las visitas guiadas tienen un precio de 12 euros por persona y es necesaria reserva previa en el parador.

 

Menú de inspiración calderoniana

 

Aparte de todas estas actividades y con el fin de añadir un atractivo gastronómico un año más a esta cita escénica, durante la celebración del festival el Parador ofrecerá a los clientes un menú especial del Siglo de Oro, inspirado en la época de Calderón de la Barca (1600-1681), de cuyos textos se han rescatado una selección de platos.

 

El menú se compone de varios tiempos. En primer lugar, presenta cuatro bocados de la época bajo la denominación de La taberna del puntapié”, celebres bodegones donde se servían comidas, especialmente desayunos, con viandas sencillas como escabeches, quesos, frutos secos, torreznos, aguardientes y, por supuesto, vinos.

 

Así se podrá degustar un platillo de lechuga y otras hierbas con escabeche de perdiz, cebollitas encurtidas rellenas de zorza de morcilla de caldero, berenjenas fritas con miel de caña y empanada de sardinas encebolladas con berros.

 

Para el plato principal de pescado se servirá un taco de bacalao cecial, con salsa de almendra y azafrán, como exponente de los pescados en escabeches y en salazón que consumían las clases bajas, y como propuesta cárnica unas albóndigas de cordero en salsa, elaboración muy popular en el siglo XVII.

 

El menú remata con un postre sobre una versión actualizada del letuario (Electuario), un plato típico de la época similar a una mermelada con diversas consistencias, elaborada con ingredientes como miel, naranja y aguardiente, que se ha adaptado y se presenta en varias texturas.